LOS ANILLOS DE COMPROMISO
La costumbre de usar anillos de compromiso se remonta a la época de los romanos, aunque el tradicional anillo de diamantes, símbolo de la fidelidad, data del siglo xv. El aro liso de oro del anillo de boda simboliza la eternidad y el ciclo de la vida.
El anillo se lleva en el dedo anular porque según la tradición romana pasa la vena amoris. La mano en la que tradicionalmente se lleva depende de cada zona. Pero desde hace los tiempos del Imperio Romano, se afirma que la vena amoris pasa por el dedo anular izquierdo que conecta directamente al corazón. En realidad, hoy se sabe que la “vena amoris” no existe, pero quedó la tradición. Tradicionalmente, es ofrecido por el hombre como regalo a su novia cuando ella accede a la proposición de matrimonio y representa una aceptación formal.
La piedra preciosa que acompaña a los anillos de compromiso por excelencia es el diamante. Representa perfección, voluntad de triunfo, firmeza y rectitud. Es de las piedras más resistentes y significa que la promesa de amor es eterna.
El anillo con cinco brillantes simboliza la fe, la confianza, la perseverancia y la constancia en el AMOR.
