Muera la autoridad. La autoridad es necesaria para perpetuar la desigualdad social, que garantiza al rico vivir en el ocio y condena al pobre al rudo trabajo y a la abyecta miseria. El burgués, pues, necesita que haya autoridad, pues de lo contrario, tendría que tomar el arado, la garlopa o el martillo para ganarse su subsistencia y la de su familia. Pero el pobre, ¿para qué necesita la autoridad? La autoridad nunca ha sido buena con él; la autoridad ha sido para el desheredado la madrastra huraña, castigadora y malvada, castradora de voluntades. Todavía no sé que en algún país del mundo haya sido la autoridad el escudo o el ángel guardián de los pobres, y eso es así, porque no puede servir a dos amos al mismo tiempo: al rico y al pobre. La autoridad fue instituída para cuidar los bienes materiales de la clase rica que se veían amenazados por los hambrientos.
-Ricardo Flores Magón, del genuino periódico anarquista Regeneración, 1912.
Grabado de Alberto Beltrán, 1950.